San Ildefonso

San Ildefonso, el patrón de Toledo

Breve biografía

San Ildefonso es considerado una de las mayores glorias de la Iglesia de España, honrada como Doctor de la Iglesia. Nació en el 607 durante el reinado de Witerico en Toledo, de estirpe germánica, y era miembro de una de las familias regias visigodas. Era sobrino del obispo de Toledo San Eugenio III, quien comenzó su educación. Ildefonso recibió una brillante formación literaria y se ordenó de diácono en el año 632-633. Fundó un convento de religiosas en los alrededores de Toledo y posteriormente fue elegido abad y obispo de la ciudad.

La devoción a la Virgen María

San Ildefonso es conocido por su gran devoción hacia la Santísima Virgen María, Madre de Dios. En su literatura, muestra un entusiasmo exagerado hacia la Virgen, lo que se debe fundamentalmente al lenguaje mariano que se impuso en Toledo en aquella época. Su obra literaria es fecunda en libros y textos litúrgicos que hablan de su amor y devoción hacia la Virgen.

El milagro del encuentro con la Virgen

El 18 de diciembre del 665, San Ildefonso y sus clérigos fueron a la iglesia para cantar himnos en honor a la Virgen María. Encontraron la capilla brillando con una luz deslumbrante que los asustó. Todos huyeron excepto Ildefonso y sus dos diáconos. Ante ellos se encontraba la Virgen María, sentada en la silla del obispo, rodeada por una compañía de vírgenes entonando cantos celestiales. La Virgen le dio una casulla y le instruyó que la usara solo en los días festivos designados en su honor. Este milagro fue prueba clara de la devoción de Ildefonso hacia la Virgen y el Concilio de Toledo ordenó un día de fiesta especial para perpetuar su memoria.

Oración a María

En su libro De la perpetua virginidad de Santa María, San Ildefonso escribe una hermosa oración a la Virgen María, en la que se humilla ante ella y pide que lo permita consagrarse a ella y a Dios. La oración es un testimonio de su amor y devoción hacia la Virgen y es considerada una de las más bellas de la literatura cristiana.

Legado

El legado de San Ildefonso es muy grande para la ciudad de Toledo y su catedral. La historia de su milagroso encuentro con la Virgen ha sido transmitida ininterrumpidamente a lo largo de los siglos y ha sido muy importante para la ciudad. En la catedral de Toledo, se conserva una piedra en la que la Virgen puso sus pies cuando se le apareció a San Ildefonso. San Ildefonso es patrón de la ciudad de Toledo, y su fiesta se celebra el 23 de enero. También es patrón de la ciudad de Zamora, donde reposan sus restos, y de la ciudad de Mairena del Aljarafe en la provincia de Sevilla.